La Nueva Revelación recibida por Jakob Lorber

Resumen de la obra El Sol Espiritual

Contenido

Capítulo 2.108: La rebelión de las fuerzas pequeñas: Nada es destructible

Capítulo 2.109: Imágenes del primer y segundo infierno

Capítulo 2.110: Cada hombre lleva dentro de su individualidad tanto el cielo como el infierno dentro de sí

Capítulo 2.111: Cuerpo, espíritu, principio de vida

Capítulo 2.113: Otra imagen del infierno más profundo

Capítulo 2.114: Deseo de poder y orgullo — semillas del infierno

Capítulo 2.115: Frutos que maduran para el infierno

Capítulo 2.116: Todos los secretos se revelan en el estado espiritual

Capítulo 2.117: Cielo e infierno — polaridades en el ser humano

Capítulo 2.118: Principios celestiales e infernales

Capítulo 2.119: El espíritu, creador de su propio mundo

Capítulo 2.120: Desarrollo continuo de los discípulos en el más allá. El reino medio (Hades)

Capítulo 2.121: Cada vida tiene caminos determinados por el Señor a partir de Su amor

Capítulo 2.122: Progreso de los discípulos a través de los planetas y las 7 esferas del sol hacia su objetivo celestial

Capítulo 2.123: Retrospectiva de las diez esferas espirituales vistas

Capítulo 2.124: Cada persona lleva en sí una semilla diferente para el desarrollo del mundo espiritual

Capítulo 2.125: El reino de los cielos es igual a este tiempo presente

Capítulo 2.126: Un árbol como ejemplo de la esencia del reino espiritual

Capítulo 2.127: Un niño como imagen del reino de los cielos y del universo

Capítulo 2.108: La rebelión de las fuerzas pequeñas: Nada es destructible

Capítulo 2.109: Imágenes del primer y segundo infierno

En el capítulo 109 del tomo 2 de la obra El sol espiritual recibido por Jakob Lorber, titulado «Imágenes del primer y segundo infierno», se describe cómo se manifiestan y operan los infiernos desde una perspectiva espiritual y moral. Aquí se exploran las diferencias entre el comportamiento humano influenciado por el cielo y por el infierno, y se usan como analogías para entender el estado de las almas en el más allá.

Primer infierno

Segundo infierno

Lecciones espirituales

En resumen, el autor de la obra utiliza este capítulo para ilustrar cómo las actitudes y comportamientos humanos, cuando se centran únicamente en los deseos materiales y el egoísmo, reflejan los estados infernales del alma. Estas reflexiones están diseñadas para incentivar a los lectores a buscar una vida más espiritual y conectada con el amor y la comprensión divina, en lugar de sucumbir a la codicia y el odio.

Capítulo 2.110: Cada hombre lleva dentro de su individualidad tanto el cielo como el infierno dentro de sí

En este capítulo se discute cómo cada persona, según su individualidad, lleva consigo tanto el cielo como el infierno. Se presenta una reflexión sobre las numerosas y variadas descripciones del infierno, subrayando la subjetividad de estas representaciones y cómo reflejan más las percepciones individuales que una realidad absoluta.

Se menciona que, a lo largo del tiempo, han existido innumerables descripciones del infierno en la Tierra, todas ellas provenientes de orígenes similares pero con grandes diferencias entre sí. Estas incluyen imágenes de un pozo de azufre ardiente, un gusano abrasador, fuego furioso, oscuridad eterna y muerte eterna. En algunas descripciones, los condenados son torturados, hervidos y asados; en otras, son nobles libres. Algunas visiones muestran el infierno como un lugar de frío extremo, otras como un fervor de ira ardiente.

El texto destaca que, debido a estas variadas percepciones, el infierno se presenta como una entidad proteica que no puede ser fijada en una sola forma. La explicación de estas diferencias se encuentra en cómo se perciben las cosas exteriormente de manera superficial y cómo esto cambia cuando se observa desde una perspectiva más profunda.

Para ilustrar este punto, se compara con las percepciones diversas y a menudo erróneas que tienen los ciudadanos de un estado sobre su política secreta. Se describe cómo diferentes personas tienen opiniones muy variadas sobre el funcionamiento del estado, basadas en sus experiencias y entendimientos limitados. De manera similar, la percepción del infierno está influenciada por la individualidad y la comprensión limitada de cada persona.

Se argumenta que muy pocos han tenido la oportunidad de ver el verdadero fondo del infierno; la mayoría solo ha visto aspectos superficiales o fenómenos. Por lo tanto, las descripciones del infierno han sido variadas y nadie tiene una comprensión completa de este lugar.

El texto concluye que, al igual que solo un monarca sabio podría entender completamente la política secreta de un estado, solo aquel que es señor sobre todos los cielos y todos los infiernos puede comprender completamente la naturaleza del infierno. Además, cada individuo, al observar su propia condición y sus propias imperfecciones, puede ver una versión personal e incompleta de su propio infierno o cielo imperfecto.

La verdadera comprensión del infierno y del cielo, así como la identificación de sus fundamentos, será revelada más adelante.

Capítulo 2.111: Cuerpo, espíritu, principio de vida

  1. Para entender el principal fundamento del infierno, es necesario observar cómo las percepciones del ojo humano se reciben y, a partir de ahí, deducir espiritualmente.
  2. Las condiciones de vida y sus manifestaciones son constantes bajo un Señor eterno e inmutable. El espíritu vive de manera idéntica al cuerpo.
  3. El principio de vida no reside en el cuerpo, sino en el espíritu. El cuerpo es mortal y pasivo, mientras que el espíritu es inmortal y activo.
  4. El espíritu utiliza el cuerpo como una herramienta, similar a cómo un artesano usa sus herramientas para crear.
  5. El espíritu vive según sus propios principios y condiciones de vida, sin que el cuerpo pueda alterarlas.
  6. Para comprender el infierno, hay que observar las mismas condiciones en la vida corporal y luego en la espiritual absoluta. El infierno en la Tierra es una réplica de su estado absoluto espiritual.
  7. El cuerpo restringe la capacidad creativa inmediata del espíritu, lo que fomenta la paciencia, una cualidad esencial para la vida eterna.
  8. El ejemplo del carpintero ilustra cómo el espíritu, a través de la paciencia, convierte sus ideas en realidad, enfrentando las limitaciones de la materialidad.
  9. En la vida espiritual absoluta, el espíritu puede realizar sus ideas instantáneamente, pero esta capacidad se da a los buenos de manera real y a los malos de manera ilusoria.
  10. La principal diferencia entre la vida natural y la vida espiritual absoluta es la restricción material en la primera, que no existe en la segunda. Este conocimiento prepara para entender mejor la naturaleza del infierno fundamental.

Capítulo 2.113: Otra imagen del infierno más profundo

  1. Un hombre lujurioso desea incesantemente satisfacer sus deseos carnales con las mujeres más hermosas, sin considerar el propósito divino del acto sexual.
  2. Si no fuera por las leyes de decencia pública, no habría límites para su desenfreno, incluso en lugares públicos.
  3. Con suficientes recursos, viajaría por todo el mundo buscando nuevas y exóticas experiencias sexuales.
  4. Cuando su cuerpo ya no puede satisfacer sus deseos, recurre a métodos artificiales y eventualmente a la explotación de jóvenes.
  5. La obsesión por la carne lo convierte en un egoísta extremo, matando todo sentido espiritual y amor por los demás.
  6. Este tipo de persona se convierte en un ateo, adorando únicamente la naturaleza material mientras le proporciona placer.
  7. Al no poder satisfacer sus deseos, su frustración se convierte en ira y violencia, perdiendo todo rastro de humanidad.
  8. La sociedad está llena de tales individuos, cuyas lujurias se manifiestan incluso en sus pensamientos, afectando negativamente a otros.
  9. Las hijas pueden ser corrompidas espiritualmente por la mirada lujuriosa de estos individuos, debilitando su moralidad.
  10. La influencia de pensamientos lujuriosos puede ser más dañina en el estado natural que en un estado somnambúlico, afectando profundamente la esfera espiritual de las personas.

Capítulo 2.114: Deseo de poder y orgullo — semillas del infierno

Dominio y orgullo en el género femenino

Se necesita un mínimo de conocimiento psicológico para descubrir que en el género femenino el deseo de dominio es el rasgo característico predominante; pues el ansia de poder y la vanidad son gemelos y tienen la misma raíz. ¿Dónde está la mujer que no posee algún grado de vanidad, ya sea en su vestimenta, en la decoración de su habitación o en otros aspectos?

El vínculo entre vanidad y orgullo

Examinad la tendencia de esta vanidad y no encontraréis nada más que la semilla viva del orgullo y el subsiguiente deseo de dominio. Se dirá aquí: No, eso es abordar el asunto de manera demasiado profunda y grosera. Al contrario, se debería alabar un cierto grado de vanidad en el género femenino en lugar de criticarlo despiadadamente. Este cierto grado de vanidad es solo un hijo de la modestia femenina y del sentido de limpieza asociado, lo cual es evidentemente una virtud y no un defecto del género femenino.

La falsa virtud del orgullo y la vergüenza

Se ha llegado a un punto en el mundo donde se considera la vergüenza como una virtud y se corona a la humanidad con el honor, y esa es la mejor cosecha para el infierno; pues por este camino deben caer los hombres, donde de otro modo podrían caer apenas. Se pregunta: ¿Por qué? Pero yo pregunto: ¿De quién es la parte del honor terrenal del hombre? ¿Es parte de su humildad o de su orgullo?

Humildad frente a honor

El humilde busca el nivel más bajo, donde ya no hay honor ni distinciones, como lo hizo el Señor con su gran ejemplo, poniendo Su honor en la más profunda humillación y en lo que en realidad es la mayor vergüenza del mundo. Un honor similar fue concedido a todos Sus primeros seguidores. Pero yo pregunto: ¿Qué tiene que ver el sentido de la vergüenza cuando uno es perseguido, burlado y finalmente crucificado desnudo?

La vanidad en la práctica cotidiana

En el caso de un hombre que se encuentra accidentalmente en una habitación de vestidor femenino por la mañana, donde algunas jóvenes están todavía en negligé (ropa interior provocativa), se levantaría un clamor y las doncellas huirían a todos los rincones y detrás de todas las cortinas, naturalmente por "vergüenza" (recato). Pero, ¿qué ha visto en esa ocasión de todos sus encantos femeninos? Como mucho, una cabeza despeinada, un rostro sin lavar y adormilado, un brazo desnudo hasta el codo y tal vez medio pecho.

Transformación de la vergüenza a lo largo del día

Sin embargo, estas mismas doncellas, que por la mañana casi mueren de vergüenza, se visten luego con los brazos desnudos hasta las axilas, el cuello y el busto, tanto como la decencia permite, desnudados o cubiertos con encaje transparente para resaltar los encantos de las partes desnudas. Así termina la vergüenza matutina.

El cambio de comportamiento en eventos sociales

La misma doncella tímida que por la mañana no se habría dejado tocar por un hombre, se deja llevar por la noche en un estado casi semidesnudo a un baile, permitiendo a su bailarín tocarla libremente. ¿Dónde queda el sentido de la vergüenza matutino? Seguramente, en casa, en el vestuario desfavorable.

La hipocresía de la vergüenza en situaciones íntimas

La misma doncella tímida que muestra modestia o recato en sociedad, en una reunión privada donde los rayos del sol no llegan y el bullicio del mundo no se oye, se entrega a su amado, mostrando todo su cuerpo sin que ello se considere una falta contra el sentido de la vergüenza femenina.

Desenmascarando la falsa virtud

De este modo, este tan alabado sentimiento de virtud se desvanece completamente. Y pregunto: ¿Dónde está ahora el efecto de este sentimiento tan aclamado? Se ha esfumado, mostrando su verdadera forma al quitarse la máscara. Cualquiera con sentido común puede ver que no es más que una serpiente en el pecho femenino, o la primera semilla del infierno más profundo, de la cual brotan todos los posibles vicios femeninos.

Conclusión sobre la vanidad y la falsa modestia

Para demostrar esto de manera clara, proporcionaré ejemplos de la vida cotidiana. Si uno de vosotros se encuentra por casualidad en un vestidor femenino por la mañana, vería a jóvenes en negligé gritando y huyendo por "vergüenza". Pero esa misma vergüenza desaparece al vestirse y al participar en eventos sociales, revelando la verdadera naturaleza de este sentimiento como una simple manifestación de vanidad.

Capítulo 2.115: Frutos que maduran para el infierno

La Naturaleza del Coqueteo Femenino

Volviendo a nuestra "casta" doncella y siguiéndola una vez más en una sociedad donde, debido a sus encantos femeninos, juega el papel de reina. Su amante también se encuentra en esta sociedad. ¿Pero qué hace su favorita? ¿Se queda con él? Oh no, más bien se rodea de una multitud de otros visitantes sociales, a quienes les permite cortejarla apasionadamente. ¿Por qué?

Digo, porque conozco muy bien el mundo: no lo hace para ser infiel a su amante elegido, sino para mostrarle el enorme valor que ella tiene. De esta manera, indirectamente le está diciendo: ¡Reconoce a través de esta exhibición qué tesoro de millones tienes en mí!

Sin embargo, el amante, al no poseer la omnisciencia, ve la situación desde otro punto de vista; pronto se vuelve sombrío y aparta la mirada del lugar donde su amada está siendo cortejada. Si aún echa miradas furtivas al punto fatal, estas están cargadas de celos ardientes.

Nuestra doncella nota esto, pero no mejora en lo más mínimo. Sin embargo, comienza a jugar aún peor para vengarse de su amante, quien comenzó a subestimar su alto valor justo cuando más quería mostrárselo. En esta ocasión, el amante busca retirarse de la sociedad lo antes posible, con la intención en su corazón de decir: ¡Espera, canalla! ¡Cuando estemos solos de nuevo, te haré saber mi opinión de una manera que recordarás! Porque ahora no deseo más que vengarme debidamente de tu infidelidad.

Se reúnen, y el fruto de esta reunión son los reproches más ardientes. Una separación amorosa es la consecuencia más común, rara vez una reconciliación, que rara vez dura más que el primer amor. La no reconciliación y la reconciliación aquí llevan al mismo resultado; porque si vuelven a unirse, esta reconciliación generalmente sirve para hacer que el valor de ambos sea aún más tangible, y así, tal amor reavivado suele ser simplemente una venganza disfrazada. Y si no se reconcilian, buscarán oportunidades para superarse mutuamente en desprecio más cruel.

La doncella pronto, por pura venganza, deja de lado todas las barreras del pudor y se convierte en una coqueta. Si el antiguo amante no se arrastra a sus pies, como ella desea, por el mismo sentimiento de venganza se convierte en una prostituta, lo que lleva al amante a desterrar el último resto de su antiguo sentimiento de su corazón. Y una vez que nuestra antaño modesta doncella ha probado el dulce aguijón del deseo, como dice, ningún dios la devuelve al camino de la virtud. Si esto la hace infeliz, en su plena ira suele echar toda la culpa a ese primer amante que, según ella, ha malinterpretado vergonzosamente sus intenciones y su primera virtud.

¿Pero qué pasa después? No es nada más que el fruto ya completamente desarrollado del tan alabado sentimiento de pudor femenino. El nombre de esta fruta es: ¡Infierno perfectamente completo! o también: ¡Infierno completamente maduro, cuando la cáscara externa cae! Porque, si pudiera, en el momento de su furia libre, verlo destrozado por mil serpientes ardientes, apenas sería un rocío refrescante en su corazón en llamas.

Quien no quiera creerlo, que visite a una doncella infeliz y se entretenga con ella en una conversación sobre el objeto consciente de su desgracia. En el mejor de los casos, verá salir de la boca femenina como si todos los volcanes de la tierra estuvieran en erupción; en el peor de los casos, dirá: ¡Por favor, evíteme esto! Si has escuchado algo así, puedes imaginarte más o menos la hora. Hemos iluminado hasta ahora los frutos tal como maduran para el infierno; a continuación, sin embargo, iluminaremos el asunto de manera más específica.

Capítulo 2.116: Todos los secretos se revelan en el estado espiritual

Matrimonio por Venganza

No es raro que una doncella agraviada se case por pura venganza contra su antiguo amante, aunque no sienta el más mínimo amor por su nuevo esposo. Con esta acción, quiere castigar a su antiguo amante de la manera más dolorosa posible, incluso tratando de herirlo tanto que podría acabar con su vida. ¿Pero qué sucede realmente?

Reacción del Antiguo Amante

El antiguo amante no se siente herido, sino que, con buen ánimo, busca otra amada. A menudo encuentra una mejor que la primera. ¿Cuál es el efecto en la primera amante casada? Ella se vuelve taciturna y reservada. Su esposo le pregunta la razón, pero en vano. Lo que la aflige es demasiado grande, pesado y sospechoso como para confiárselo a su nuevo marido.

El Peso del Resentimiento

No toma más medidas para poner obstáculos a su antiguo amante, pero entierra la causa de su pesar profundamente en su corazón. Pasa el tiempo, y aunque generalmente se dice que el tiempo cura todas las heridas, solo es un remedio temporal. Tal resentimiento puede resultar en amistad, pero es una amistad superficial.

Amistad Paliativa

Se podría decir que cuando la amistad reemplaza a la enemistad, también lo hace el cielo sobre el infierno. Sin embargo, esta es una curación superficial. Como un soldado con cicatrices, que siente dolor con el mal tiempo, así es esta amistad: vulnerable a las circunstancias adversas.

La Prueba del Tiempo

Cuando el mal tiempo llega, las heridas vuelven a doler. Si estos amigos se reencontraran en el más allá en el momento en que pecaron uno contra el otro, verían claramente los daños y beneficios perdidos por su enemistad. Se encontrarían con desprecio y maldiciones, revelando que esta amistad no es más que un infierno disfrazado.

Examen de Consciencia

Por eso se dice que cada uno debe examinarse a sí mismo y que nada oculto en el hombre quedará sin ser revelado. En el estado espiritual absoluto, todo se hará visible. Por lo tanto, se aconseja a todos que revisen todas sus relaciones amistosas y enemistosas para comprender su impacto en su espíritu.

El Ejemplo del Señor

El Señor mismo fue juzgado y crucificado entre malhechores, descendió al infierno antes de ascender al cielo. Si alguien no paga hasta el último centavo, no entrará en el reino de los cielos. Por eso es crucial revisar todas las deudas de amor, ya que las deudas de amor son las más persistentes en el más allá.

El Peligro del Enamoramiento

El enamoramiento es peligroso porque afecta profundamente al espíritu. Las heridas de amor son más difíciles de sanar que las heridas materiales. Si las circunstancias impiden que el amor se realice, las heridas pueden cicatrizar superficialmente, pero siempre están latentes, listas para reabrirse con mayor intensidad en el estado espiritual.

El Amor y el Espíritu

El enamoramiento juvenil puede arruinar una vida, afectando el progreso espiritual. A diferencia de otras pasiones, el amor precoz es difícil de erradicar. Este amor imprudente lleva a la mayor impureza espiritual, ya que la corrupción del amor es la forma más profunda de degradación del espíritu.

Advertencia a los Padres

Es crucial que los padres adviertan a sus hijos sobre los peligros del enamoramiento precoz. Esta advertencia es esencial para proteger su desarrollo espiritual. La corrupción del amor es la base de la impureza espiritual, que constituye el infierno más profundo.

Capítulo 2.117: Cielo e infierno — polaridades en el ser humano

Pregunta sobre las heridas del espíritu

Alguien dice: «Bien, es muy probable que las heridas infligidas al espíritu se manifiesten y reaccionen en el estado espiritual absoluto. Sin embargo, no entendemos cómo los recuerdos de amores heridos en esta vida se convertirían en la base del infierno en el estado espiritual. Después de todo, casi todos han experimentado o causado tales heridas en algún momento. Si aceptamos que en el estado espiritual absoluto, estos recuerdos vivos se manifiestan como un infierno, nos preguntamos cuántas personas de un siglo entero podrían llegar al cielo. ¿Cómo puede ser justo que alguien sea juzgado tan severamente por una transgresión pasiva contra una orden divina, cuando le falta la fuerza necesaria para mantenerla debido a la falta de experiencia?»

El equilibrio del cielo y el infierno en el hombre

La respuesta es que todos llevamos tanto el cielo como el infierno dentro de nosotros. No se trata de quién irá al infierno, sino de entender qué constituye el infierno en nuestra existencia. Cada ser humano tiene el potencial de manifestar tanto el cielo como el infierno.

La creación del infierno en el hombre

Sería cruel y despiadado que alguien, por llevar la apariencia del infierno dentro de sí, fuera condenado a vivir en él. Incluso los ángeles llevan esta imagen del infierno dentro de ellos. De otro modo, no podrían interactuar con los espíritus rebeldes ni traer paz. Yo mismo no podría mostrarles el infierno si no lo llevara dentro de mí.

El equilibrio entre el cielo y el infierno

El cielo y el infierno dentro de una persona son como dos polaridades opuestas, esenciales para la existencia. No se trata de juzgar quién irá al infierno, sino de entender la naturaleza del infierno en sí mismo.

Fundamento del infierno: el egoísmo y la ambición

Las traiciones en el amor son una forma pura de infierno porque se basan en el egoísmo y la ambición. Los celos no surgen porque la otra persona tenga poca amor, sino porque el celoso se siente infravalorado y su ego es herido.

El opuesto del amor desinteresado

La verdadera naturaleza del infierno es el egoísmo, lo opuesto al estado donde uno debe olvidarse de sí mismo por amor a su prójimo y estar dispuesto a sacrificarse por su bienestar.

Superar el infierno interno

Es fácil subyugar el infierno dentro de uno. Perdonar de todo corazón a ambas partes, tanto al ofensor como al ofendido, en nombre del Señor, y bendecirlos sinceramente. Esto somete completamente al infierno interno.

El poder del arrepentimiento

Un solo vistazo arrepentido al buen Padre es suficiente para escapar del infierno para siempre. El ladrón en la cruz, al mirar al Señor y pedir misericordia, fue prometido el paraíso ese mismo día.

Ejemplos bíblicos de perdón y redención

El ejemplo de la mujer samaritana en el pozo de Jacob, quien había tenido siete maridos, muestra que el Señor solo pidió un trago de agua a cambio del reino de los cielos. Del mismo modo, la adúltera y María Magdalena recibieron el perdón y la redención con gestos simples de fe y arrepentimiento.

Capítulo 2.118: Principios celestiales e infernales

¿Cuándo un pecador entra en el infierno?

Una pregunta frecuente es cuándo un pecador entra en el infierno y cuándo no. Aunque la Biblia ofrece ejemplos de pecadores que han ido al infierno y otros que se han salvado, la verdadera cuestión es comprender la naturaleza del infierno y el cielo como estados del ser.

La esencia del infierno y el cielo

El infierno y el cielo no son lugares físicos sino estados de existencia que un ser libre puede alcanzar a través de sus acciones y amor. El infierno se caracteriza por el deseo de poder, el amor propio y el egoísmo, mientras que el cielo se define por la humildad, el amor a Dios y al prójimo.

Cómo distinguir entre infierno y cielo

Es fácil distinguir entre el infierno y el cielo. Si uno siente que todo le pertenece y desea tenerlo todo, entonces el infierno domina. Si uno siente que nada es suyo y todo pertenece a Dios y a los demás, entonces el cielo es el polo positivo.

Ejemplo de amor egoísta

Cuando alguien siente celos intensos y rompe su relación por la entrada de un rival, entonces está actuando desde el infierno. Este sentimiento de posesión y control sobre la otra persona muestra claramente la polaridad del infierno.

Ejemplo de amor desinteresado

Si alguien dice a su ser amado que es libre de elegir lo que quiera, sin imposiciones y con un deseo genuino de su felicidad, entonces está actuando desde el cielo. Este comportamiento refleja la esencia del amor celestial y la ausencia de egoísmo.

La regla del ser celestial

La regla para un ser celestial es retirarse y no imponer límites al amor del prójimo. Es mejor perder oportunidades mundanas que ganar algo a través de conflictos, por pequeños que sean. El sacrificio y la generosidad en la tierra se recompensan ampliamente en el más allá.

El beneficio de los sacrificios

Cuanto más se sacrifica aquí, más se encontrará en el más allá. Sacrificar algo pequeño en esta vida trae grandes recompensas en la próxima. La generosidad y la ayuda a los demás aquí se traducen en abundancia y asistencia en el cielo.

La autoevaluación

Es crucial evaluar nuestra propia polaridad para entender si estamos más cerca del infierno o del cielo. No necesitamos preguntar cómo son el cielo o el infierno, ya que cada uno de nosotros lleva ambos dentro. Nuestra polaridad determina nuestra experiencia.

No hay un lugar llamado infierno o cielo

No existe un lugar físico llamado infierno o cielo. Cada persona se convierte en su propio cielo o infierno a través de su comportamiento y estado interno. La realidad de estos estados es interna y personal.

Ejemplos y sueños

Las experiencias en sueños demuestran cómo estos estados son posibles. Aunque estamos en una apariencia de sol espiritual, en realidad estamos dentro de nosotros mismos. Este concepto se aplica a la claridad del estado espiritual absoluto, y exploraremos ejemplos para entenderlo mejor.

(Más detalles en el siguiente capítulo).

Capítulo 2.119: El espíritu, creador de su propio mundo

El regreso de un pintor de paisajes

Un buen pintor de paisajes y amante de las excursiones regresa a casa después de una salida al campo. La belleza del lugar que ha visitado le impresiona tanto que desea quedarse allí para siempre, pero sus obligaciones se lo impiden. Decide pintar la vista en dos paredes de su salón, con tal habilidad que todos los visitantes reconocen inmediatamente el paisaje.

¿De dónde obtuvo el pintor el modelo para su obra?

No utilizó grabados ni bocetos realizados en el lugar. En cambio, capturó la esencia del paisaje en su imaginación y lo reprodujo fielmente en la pared.

El proceso creativo

El pintor logró plasmar la hermosa escena en la pared gracias a un importante proceso vital. Este proceso nos muestra cómo las imágenes y conceptos existen en el espíritu humano y cómo pueden ser materializados.

La capacidad del espíritu humano

El espíritu humano contiene todo lo que la imaginación puede producir. Esta capacidad abarca desde lo más pequeño hasta lo infinito, incluyendo el cielo y el infierno, y todo lo que existe entre ellos.

Imaginación pura e impura

La imaginación de una persona puede ser pura o impura. Es pura cuando el espíritu inmortal del individuo no está contaminado por las imágenes del mundo exterior. Es impura cuando el espíritu se mezcla pasivamente con imágenes internas y externas, resultando en una confusión de lo espiritual y lo natural.

El papel de la imaginación

La imaginación, es el vasto poder del espíritu humano. Para extraer algo de esta rica cámara, solo es necesario despertar el amor. La intensidad del amor da vida a las imágenes y las hace más claras y definidas.

La creación del mundo interno

El amor, al intensificarse, madura las imágenes dentro de la persona hasta que se vuelven tan reales como el paisaje pintado por nuestro artista. Este proceso crea la verdadera "mundo interno" del espíritu.

La influencia del amor en la creación

El amor determina la naturaleza de lo que se crea. Si el amor sigue el orden de Dios, todo lo que crea es bueno. Si va en contra de ese orden, todo lo que produce es malo. Así, cada persona desarrolla en su interior un cielo o un infierno.

La manifestación externa de los actos

Cada acción debe tener una base y una forma. Las áreas marcadas por actos atroces inspiran temor y crean una forma de infierno. Por otro lado, lugares donde han vivido personas nobles y buenas generan un sentimiento de paz y un preludio del cielo.

La conclusión espiritual

Cada persona es creadora de su mundo interno a través de su amor. Nunca se entra en un cielo o infierno externo, sino en el producto de su amor. Las acciones de cada uno los seguirán, formando su cielo o infierno personal. Y así, nuestros conocidos estudiantes solares viven esta realidad, la cual exploraremos más adelante.

Capítulo 2.120: Desarrollo continuo de los discípulos en el más allá. El reino medio (Hades)

Capítulo 2.121: Cada vida tiene caminos determinados por el Señor a partir de Su amor

Capítulo 2.122: Progreso de los discípulos a través de los planetas y las 7 esferas del sol hacia su objetivo celestial

Capítulo 2.123: Retrospectiva de las diez esferas espirituales vistas

Capítulo 2.124: Cada persona lleva en sí una semilla diferente para el desarrollo del mundo espiritual

Capítulo 2.125: El reino de los cielos es igual a este tiempo presente

Capítulo 2.126: Un árbol como ejemplo de la esencia del reino espiritual

Capítulo 2.127: Un niño como imagen del reino de los cielos y del universo